lunedì 8 dicembre 2014

La Rusia de Putín

Salvador Correa

Fonte: http://www.pcperuano.com/la-rusia-de-putin/   




El tema del análisis de Rusia en su modelo económico actual, para sacar algunas conclusiones objetivas, es haciendo una comparación de lo que fue el modelo socialista con el actual. Tengo la suerte de haber conocido el socialismo de la década del 70, en la dirección de Leonid Brezhnej, y naturalmente hay una enorme diferencia, y probablemente cada uno saca sus conclusiones desde el ángulo que lo vea. Me he quedado impresionado en mi visita a Rusia, al notar que la industria nacional soviética prácticamente desapareció, no hay artículos con valor agregado, como son la línea blanca, electrónica, aparatos eléctricos, aparatos fotográficos, relojes, automóviles, buses, camiones que sean de producción nacional, todo, es manufactura importada. En la época soviética, toda la producción antes señalada, era mercancía de las empresas socialistas, los autos eran el Moskvich, el Lada, los carros pesados Kamaz, los artefactos eléctricos eran de producción nacional, así como los equipos fotográficos muy famosas sus marcas; ahora eso no existe, ¿que pasó, es signo de avance esos cambios, ser consumidor de manufactura importada fortalece la economía? Naturalmente no. Ahora el consumidor ruso se da el gusto de comprar carros Mercedes, Ford, Toyota y otras, todo los equipos domésticos son lo que tradicionalmente se conocen en occidente. Rusia se convirtió en importador de manufactura, como la hacen los países subdesarrollados y depende de las divisas de la exportación de productos primarios, como es el petróleo y el gas, o sea el típico modelo de un país del tercer mundo. Esta situación, que aparentemente pareciera una economía de bienestar, sin embargo se ha convertido en una economía capitalista atrasada y dependiente, a excepción de la industria militar. El modelo es muy vulnerable a los vaivenes de mercado internacional, porque el presupuesto fiscal y todos los programas de inversión pública están sujeto al precio del petróleo, cuando hay caídas de los precios del mercado mundial, el rublo entra en crisis y todo el sistema financiero se desbalancea. El crack económico de los años 90, fue diseñado precisamente para justificar que el modelo socialista no sirve y que hay que remplazarlo, destruyeron todo el aparato productivo nacional, calculan algo mas de 80,000 empresas, que ahora por la obsolescencia no sirven, la mafia capitalista no tuvo escrúpulos de destruir todo para garantizar la instauración del capitalismo y aparecer como la salvadora de la crisis, el costo esta a la vista, Rusia no produce nada, toda la cadena de tiendas de supermercados en Moscú esta llena de mercancía importada asiática, europea y americana, desapareció los aparatos “made in urss.” Para el mundo capitalista, desde el punto de vista económico es una victoria total, el mercado cautivo ruso, que es grande se, convirtió en un mercado más de las grandes transnacionales, ¡que felicidad para los grandes monopolios!, un triunfo sin ninguna maniobra militar, que en otros casos se hacen para controlar los mercados. Los analistas rusos, se dan cuenta de esta situación, una economía vulnerable, porque el presupuesto fiscal se hace estimando el precio del barril de petróleo en el mercado mundial, si no fuera porque todavía quedan reservas del poder de lo que fue el socialismo, Rusia no es nada. El poder nuclear, su poder militar, sus investigaciones espaciales y la reserva científica se deben al socialismo. El modelo capitalista extranjero no le interesa crear la tecnología para Rusia, sino hacerla consumidora. La nueva oligarquía, los rusos capitalista, que hicieron fortuna con la mafia en la época soviética, prefieren llevar sus capitales a los paraísos fiscales y no invierten en Rusia, a pesar que se toman medidas para evitar la fuga de capitales; ante tal situación y a falta de recursos financieros para inversiones, desarrolla su política de privatizaciones, de lo poco que queda, venta de tierras, ahora piensan en los ferrocarriles, reducen el presupuesto por educación y salud, al mismo estilo occidental, se acabó la educación gratuita, se acabó la salud gratuita, ahora todo esta en función del dinero y cada vez se va polarizando la sociedad en pobres y ricos. Los desocupados y mal pagados por la inexistencia de la industria es masiva está por el orden del 5%. El PBI de Rusia en el año 2013 ha crecido un poco más del 1%, cuando estimaban más 4 %, esto no es un buen indicador en el crecimiento, Rusia requiere crecer por encima del 4% por más de 10 años, para lograr los niveles anteriores y tener el equilibrio estratégico con los EEUU. China, con sus niveles de crecimiento por más de dos décadas de un promedio de 10%, a logrado ubicarse en el segundo lugar por el nivel del PBI después de los EEUU. No olvidemos que el PBI de EEUU es de 14 billones de dólares, muy superior a toda la economía de la Unión europea juntas, y Rusia esta bordeando por los 2 billones de dólares, y se ubica entre el octavo o noveno lugar, Alemania supera en el PBI a Rusia, es el cuarto después del Japón, la fortaleza de un país depende de su capacidad económica para poder disuadir al contrincante, Rusia con su estructura industrial no garantiza a largo plazo un crecimiento sostenido, salvo grandes cambios en el orden económico, aunque Putin dice que no aceptará la supremacía militar de otros países, pero la realidad es que el poder de un estado parte de su estructura, de su base económica, y ese es no solo un principio básico del marxismo, sino una realidad indiscutible. La pérdida de influencia geopolítica en el mundo refleja la situación interna de Rusia, los países se arriman a los países fuertes, tal como sucede ahora con China. Rusia cada vez pierde espacio de influencia, el caso típico es Ucrania, Rusia ofrece 15.000 millones de dólares en crédito de préstamo y gas a menos precio, la Unión Europea le ofrece 20,000 millones de euros, los intereses políticos tienen un costo económico, el empleo de la fuerza militar, hace peligrar la estabilidad del mundo, pero un conflicto armado no le garantiza réditos en el largo plazo a Rusia.

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